El desarrollo del cerebro comienza con la formación y el cierre del tubo neural, el primer tejido nervioso que parece una lombriz gorda estirada a todo lo largo de la parte dorsal del embrión.
El tubo neural se forma de la placa neural, que comienza a formarse a los 16 días de la concepción. Esta placa se alarga y comienza a doblarse, formando una ranura aproximadamente a los 18 días, que luego comienza a fusionarse alrededor de 22 días después de la concepción. A los 27 días, el tubo está totalmente cerrado y ya ha comenzado su transformación en el cerebro y la médula espinal del embrión.